un día fuimos a berisso a la mañana
era lo más lejos que llegábamos

berisso y
a la mañana,
recién levantados,
con mucha plata en el bolsillo
que guardamos para irnos a berisso a la mañana
y comernos todo en los puestos de una feria,
sentarnos en una silla de plástico y comernos todo,
ponerle un montón de condimentos a las cosas,
mucho tanto que después buscamos una canilla de agua
que hubiera por ahí
porque nos quedamos sin plata
llenos , repletos
y esperamos un bondi sentaditos en el pasto
compartiendo un auricular
que tenía un disco que nos hacía acordar a noches
de bares terribles
y fue como si viéramos
una propaganda de esas con productos gigantes
que aclaran que las fotos solo son ilustrativas,
lo que quiere decir que por ejemplo
esa ensalada de frutas que está dibujada en las latas
que es una ensalada de como  siete colores
anticipa una verdadera ensalada de frutas
de solo dos,
esto no es una pipa no esto no era una uva
esto no eran frambuesas,
esto era el blanco y negro contenido de la lata,
oscuro contenido de la lata
y vos dijiste tengo hambre
yo no lo podía creer.