vomité rosa sobre la nieve y me sostenía un pibe,
me llevó a la pieza y me dijo
que iba a intentar olvidarse
de que fue un asco

cuando me desperté
me dijo
que se acordaba el color rosa,
nena
qué comiste?

yo creo
que me tragué un piropo
y lo largué porque no lo aguanté más,

cuando pasó eso
al inclinarme
se me salió la peluca,

yo era una gordita de cabaret
con la boquita rebocada
pero perdí,
las pestañas se me disolvieron
porque lloré con la arcada
y después lloré al día siguiente
por impotencia,

sentía
que había arruinado un momento mágico,
que el chico era un arcoiris
y yo era una nube gris enorme llena de rayos,
y lloré tormenta eléctrica
y las marcas del rimmel en la almohada
pensaba dejarlas de recuerdo
como una pintura de la noche
en que nada salió bien
pero la mujer del servicio de habitación del hotel
pasó temprano mientras desayunábamos,
yo me tomé un antiácido que tenía guardado
no hablamos mientras comíamos,
no hablamos nunca más.